El 6 de junio de 2022, el Embajador de China en Cuba Ma Hui asistió e intervino en una videoconferencia especial para conmemorar el 175 aniversario de la llegada de los primeros chinos a Cuba, con la participación de la Cra. Caridad Diego, Presidenta de la Asociación de Amistad Cuba-China; el Embajador de Cuba en China, Cro. Carlos Miguel Pereira Hernández; el Director General de Comercio Exterior y Relaciones Exteriores del Gobierno de La Habana, Cro. Luis Carlos Góngora Domínguez y representantes de la comunidad china en Cuba.

    En su intervención, el embajador Ma señaló que este año se cumple el 175 aniversario de la llegada de los primeros chinos a Cuba. Durante mucho tiempo, la diáspora chino-cubana ha estado en el mismo barco que el pueblo de la isla, participando en la heroica lucha contra la opresión y la explotación, y empujando el enorme barco del socialismo a zarpar. Planteamiento que argumentaba con la contribución de la misma, también, a la cooperación entre los dos países en diversos campos de manera activa. Mencionaba además, que ambos se han nutrido mutuamente de sus culturas y han fomentado el crecimiento de la magnífica cultura tradicional china en el país caribeño.

    El embajador Ma agregó que las civilizaciones se enriquecen con los intercambios y el aprecio mutuo. El camino recorrido por los chinos en Cuba representa también un viaje de encuentro y entendimiento entre las civilizaciones china y latinoamericana. En este sentido, la "Ruta Marítima de la Seda" ha unido a China y América Latina, ha promovido los intercambios entre ambas civilizaciones y ha arraigado el espíritu de la Ruta de la Seda y la amistad chino-latinoamericana en el corazón de los pueblos de la región.

    Igualmente subrayó, que el mundo está experimentando un gran cambio sin precedentes y que el tema de la época de la paz y el desarrollo se enfrenta a una compleja y severa prueba. Manteniendo el planteamiento de que la humanidad es una comunidad de destino compartido y no hay islas culturales en el entorno globalizado, y de que la mejora de los intercambios e interacciones entre países puede fomentar nuevas oportunidades y constituir una fuente de sabiduría para el desarrollo nacional. Siguiendo esta línea de pensamiento, China y Cuba deben reforzar los intercambios y el aprecio mutuo en el ámbito de la cultura y la civilización, y seguir fortaleciendo la base humanista de la comunidad de destino chino-cubana.

    El embajador Pereira, por su parte, afirmó que la comunidad china ha sido de gran importancia para la formación y el desarrollo de la cultura y la identidad nacional cubanas. Los chinos en la isla han participado activamente en la independencia nacional y la revolución socialista, y han contribuido al desarrollo multicultural del país. Durante mucho tiempo, agregaba, la diáspora ha heredado y llevado adelante la cultura y las virtudes tradicionales chinas, aportando un impacto positivo a la sociedad cubana. Recordaba, que a lo largo de los 62 años transcurridos desde el establecimiento de relaciones diplomáticas, Cuba siempre ha estado a la vanguardia del desarrollo de las relaciones con China y ha liderado el progreso de las mismas entre el gigante asiático y América Latina. Enfatizaba en que en la actualidad, las relaciones entre ambos países se encuentran en el mejor momento de su historia, defendiendo firmemente los intereses fundamentales de cada uno y apoyando sus respectivos esfuerzos de construcción socialista. Terminaba expresando sus deseos de que esa amistad, como buenos camaradas y hermanos, siga siendo fuerte durante mucho tiempo.

    Mientras, el director general Góngora se refirió a que los chinos en Cuba han apoyado durante mucho tiempo la construcción de la provincia de La Habana y han contribuido a su desarrollo social y económico. Comprometiéndose a que el Gobierno Provincial y la Unión Presupuestada del Barrio Chino continuarán sirviendo a la diáspora para encajar con el desarrollo del barrio, harán un buen trabajo en la reactivación de las calles chinas en La Habana y contribuirán a mantener el alto nivel de las relaciones bilaterales.